Descripción
La flor del Aceite Esencial de Lavanda es nativa de Europa meridional y el norte de Africa. Su aroma es floral, fresco y con un dejo herbal. El Aceite Esencial de Lavanda es tan versátil como útil en cualquier hogar. Su aroma calma y aquieta los nervios, la ansiedad y el estrés ayudando a conciliar el sueño cuando resulta difícil bajar revoluciones. Sus propiedades maravillosas sobre la piel lo hacen el aceite ideal para tener en el botiquín de primeros auxilios a la hora de reconfortar la piel en casos de quemaduras, eczemas y alergias.
Reduce: Miedo, depresión, pánico, frustración y estrés.
Mejora: Calma, relajación, balance y espiritualidad.
Alivia: Dolores menstruales, antiespasmódico, quemaduras, picazón, dolor de cabeza, migraña, insomnio, alergias y la descomposición horaria.
Se puede gozar de las propiedades de los Aceites Esenciales a través del olfato (utilizando difusores) o de la piel (por medio de un masaje).
Para realizar un masaje: Colocar de 5 a 10 gotas deAceite Esencial de Lavanda en 100ml de aceite de origen vegetal (por ejemplo aceite de semillas de uva o de almendras) y realizar el masaje en la zona deseada.
Para difuminar en el ambiente: Colocar de 10 a 15 gotas deAceite Esencial de Lavanda en el difusor eléctrico o de cerámica.
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